Conociendo a la biodiversidad de la cima de la Meseta de Hato Grande, Juigalpa

Unos 100 estudiantes de los turnos Viernes y Sabatino del UNAN CUR Chontales subieron hasta a la cima de las Mesetas de Hato Grande para realizar un estudio de la biodiversidad de esa cumbre de unos 400 metros sobre el nivel del mar. Aquí parte de ellos.

Un contingente de unas 110 personas, la mayoría estudiantes de las carreras de los turnos por encuentro, acompañados de sus maestros y equipo de apoyo de la Estación Biológica “Francisco Guzmán Pasos” del Centro Universitario Regional de la UNAN – Managua en Chontales (UNAN CUR Chontales) hicieron el sábado 17 de febrero de 2024 una ardua gira hasta a la cumbre de las Mesetas de Hato Grande, ubicadas hacia el oeste de Juigalpa, que tienen una altura de casi 400 metros sobre el nivel del mar.

La travesía del 17 de febrero de 2024 es la segunda que por esos pedregosos, estrechos y empinados senderos que realizan los estudiantes de las diversas carreras del CUR Chontales como parte del curso del componente electivo “Matemática y Naturaleza del Geoparque Serranías de Amerrique”, porque la primera visita a este bello parque natural se realizó el martes 13 de febrero.

La profesora M.Sc. Tirza Patricia González Barberena orientando a los estudiantes sobre el trabajo a desarrollar en la cima de la meseta y orientando sobre los cuidados que deben tener durante el largo y arduo camino que estaban por iniciar, hasta llegar a la cima.

Estudiar la biodiversidad de la montaña para desarrollar proyectos de reforestación

El objetivo de la gira hacia esa cima es hacer un estudio de la biodiversidad de esta meseta, la cantidad y tipo de plantas por metro cuadrado y tamaño y también contribuir con proyectos de reforestación y el desarrollo del Proyecto Turístico de Geoparque Serranías de Amerrique” que cruza al departamento de Chontales.

Los estudiantes caminaron horas y horas por las veredas pedregosas, laderas muy inclinadas y hondonadas hasta llegar a la cima en esa segunda ocasión, pues el primer grupo que llegó el martes 13 de febrero hizo el estudio del bosque que cubre las faldas de la cima de la montaña que esta formada de inmensas rocas, donde sólo crecen pequeñas plantas y no pasan ni de los 10 centímetros de alto, pero sí se observan pequeños árboles de nancite “desperdigados”.

Iniciando la larga y ardua caminata hacia la coma de Hato Grande.

Esta segunda gira la hicieron estudiantes de las carreras de los turnos viernes y sabatino, entre estas Diseño Gráfico y Multimedia, Educación Física y Deportes y de las carreras de Educación como Ciencias Sociales, Ciencias Naturales, Matemática, Lengua y Literatura Hispánicas.

Ellos fueron acompañados por el equipo de docentes integrado por la maestra M.Sc. Tirza Patricia González Barberena, el doctor Marcos Antonio Reyes Centeno, M.Sc. Jazcar Bravo Rivas, la maestra Verónica Andrea Oporta Dumas; y también trabajadores de la Estación Biológica que trabajaron como guías por los senderos.

Allá, al fondo se observa la Meseta de ato Grande hacia donde llegarían horas después.
Había trayectos boscosos y frescos y otros de enormes rocas y faldas muy empinadas de la montaña.
Cuando ya se sentía que hasta los termitos de agua pesaban un quintal.
El maestro Marcos Antonio Reyes Centeno siempre manteniendo su paso, sin que lo detuviera el escarpado de la montaña de rocas o matorrales.
, «Ya no aguanto, hasta aquí llego»
Cuando ya las piernas no aguantan, pero la decisión es llegar hasta la cima de Hato Grande.
Tan cansada de caminar y subir la empinada falda de la montaña que en un momento de descanso no sabía si llorar o reir.

Otras imágenes de la jornada

Otra imágenes que enseñan belleza de este parque natural de Juigalpa, al que es muy duró llegar a la cima, pero que vale la pena llegar

También te podría gustar...