Servir con el corazón, dignidad y humildad prometieron los 34 médicos graduados por la UNAN-FAREM Chontales

Lágrimas de los graduados y de sus padres y familiares hubo en la III Promoción de Médicos Pre Internos 2016-2017 de la carrera de Medicina de la Facultad Regional Multidisciplinaria de la UNAN-Managua en Chontales (UNAN-FAREM Chontales), en la que 34 jóvenes recibieron sus diplomas como tales y ahora pasarán a dar su servicio de interno rotatorio en los centros asistenciales de sus departamentos o comunidades de la Región V.

La promoción que se efectuó en el auditorio “13 de Diciembre” del Recinto Cornelio Silva Argüello” de ésta facultad, fue dedicada a sus maestros, los doctores Belinda Azucena Zamora y Miguel Ángel Meléndez Gómez, fue presidida por los maestros MSc. Emilio José López Jarquín, Decano de la UNAN FAREM Chontales; MSc. María Mercedes Zapata Quintanilla, Secretaria de Facultad; la doctora Vilma Sirias, Responsable del SILAIS Chontales.

El maestro MSc. Emilio José López Jarquín instó a los nuevos médicos pre internos a ejercer con dignidad y servicio su profesión para un verdadero valor a su diploma

Mejores estudiantes

Los símbolos del país y de la universidad fueron llevados por los tres mejores estudiantes del curso; Jocsan Gabriel Rivera Guevara, con 91 por ciento de promedio, llevó la bandera de Nicaragua; Néstor Manuel Serrano Cenizales, con promedio de 90.82, llevó la bandera de la UNAN-Managua, y Alexandra Obregón Hernández, con 90.64 promedio, el Estandarte de la UNAN-Managua.

En el acto, los estudiantes también reconocieron los sacrificios hechos por sus maestros. Ellos son: los doctores Janeth Isabel González González, Carlos Eliezer Ruiz Flores, Luis Giovanni Yescas Mayorga y Alma Iris Argüello Argüello.

Lágrimas de alegría y orgullo de padres e hijos

La emotividad del acto la puso el maestro Emilio José López Jarquín, quien luego de preguntar qué significaba recibir un título, llamó a los tres mejores estudiantes a subir al estrado y también a sus padres y familiares que los han acompañado en los cinco años de estudios, dándoles apoyo moral y económicos y hasta compartiendo desvelos.

Jocsan Gabriel Rivera Guevara, agradeció a sus padres por su apoyo y exhortó a sus compañeros a seguir estudiando para ser mejores

A cada padre de familia le preguntó sobre los sacrificios que hicieron para lograr que su hijo o hija para llegar hasta el momento de recibir el diploma. Seguidamente, luego de escuchar a los padres quebrárseles la vos, al igual que a los graduandos pidió que entregarán pergamino a sus padres. Y ellos lo hicieron, diciéndoles: “este título es tuyo”.

Y así le pidió a cada uno de los 34 graduados que entregara el título a su madre, a su padre o al familiar que se ha entregado y sacrificado por ellos. En el auditorio, padres e hijos se fundieron en abrazos y llantos y se hacían fotos con ellos.

Al dirigirse al auditorio y particularmente a los 34 nuevos médicos, el maestro López Jarquín también les había exhortado a servir con corazón cuando estén en desempeñándose en las unidades de salud, a atender siempre a los pacientes y a sus familiares con cortesía, humildad y siempre con disposición de servir y buscando soluciones a los problemas.

Un título no vale nada si no se ejerce con abnegación y humildad

También preguntó a los estudiantes sobre el significado de un título. Varios de ellos presaron que era un estímulo de los sacrificios de los años de estudios

Los padres de familia merecen los honores por sus sacrificios y entregas sin reparos hasta lograr que sus hijos lograran coronar el sueño de ser médicos

Reafirmando lo expresado por tres de los graduandos, dijo que un título es un estímulo al empeño hecho cada día por ello, pero no sólo de ellos, sino también, por sus padres.

Sin embargo, aunque un diploma también es un documento legal que faculta a una persona para ejercer una profesión, les expresó que “un título no vale de nada si no está acompañado de una actitud positiva hacia la profesión, de proactividad, humildad, de dedicación, de abnegación, y del sacrificio que implica el poder ejercer una profesión”.

Recalcó que “sin cumplir esos compromisos, el título no vale nada, porque simplemente seremos profesionales tirados al mercado y, cuando la medicina u otra profesión ha perdido su carácter humano y el sentido del juramento hipocrático, un título no vale nada”.

La emotividad también la puso le mejor estudiante de la promoción, Jocsan Gabriel Rivera Guevara, quien previamente había reflexionado al hablar en nombre de todos los graduandos: “Cada uno de nosotros ha tenido una experiencia diferente para embarcarse en esta magnífica profesión en la que ahora tenemos el privilegio de ser llamados médicos, aunque eso acarrea un sinnúmero de obligaciones y responsabilidades, que asumiremos con compromiso para continuar aprendiendo y contribuyendo a la sociedad”.

Jocsan Gabriel Rivera Guevara, entregando el título a sus padres

Expresó que agradecía a Dios por haberles dado la vida, la sabiduría, y la fuerza para el trabajo y el estudio; a sus padres porque sin sus sacrificios no hubieran podido solventar tantas necesidades de ésta carrera, a nuestros docentes porque con su experiencia y conocimiento les formado con amor y dedicación, a las autoridades del Hospital Regional Escuela “Asunción” de Juigalpa por permitir que hicieran sus prácticas “y a los pacientes porque ellos son nuestra razón de ser y por quienes adquirimos muchos compromisos”.

Fortalecer los valores humanos

Doctora Vilma Sirias, llamó a los 34 estudiantes que pasarán ahora a hacer sus prácticas médicas pre internas ir fortaleciendo el sentir de solidaridad humana, pues en los centros asistenciales ya han comenzado a enfrentarse poco a poco a esas situaciones duras de la vida.

Les hizo ver que ya han escuchado a sus pacientes y a sus familiares y se han involucrado con el dolor de cada una de esas personas y han convivido en ocasiones con la muerte cuando uno de los pacientes se ha ido.

La profesora María Mercedes Zapata Quintanilla felicitando a una de las muchachas graduadas como médico

Afirmó que son esas situaciones que han experimentado en este proceso de formación, es lo que hace que cada uno de nosotros, siendo médicos, vayamos fortaleciendo ese sentir de solidaridad humana, los valores cristianos de la caridad, la amabilidad y estar a la par del dolor ajeno, es lo que hace al médico en ser más humano.

Por su parte, el doctor Miguel Ángel Meléndez Gómez, uno de los maestros homenajeados por los estudiantes, manifestó sentir también esa felicidad con ellos y en especial cómo se sienten sus padres. “Este es un acto feliz y de gloria por Ustedes, sobre todos para sus papas, que no saben explicar cómo se sienten ellos”, sostuvo.

Los 34 estudiantes graduados como médicos Pre Internos por la UNAN-FAREM Chontales

“Tiene que haber un ayer productivo para tener hoy cosechas fértiles. Si tenemos cosechas fértiles hoy, estamos garantizando el buen futuro de mañana. El ayer no tocó a nosotros y hoy les toca a Ustedes y de Ustedes depende el mañana”, les dijo.

Les recalcó en seguir fortaleciendo los valores de responsabilidad, estudios, disciplina, disposición y actitud en su trabajo.

¡A la libertad por la universidad

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